domingo, 8 de enero de 2012

El IV REICH,-


El fascismo triunfó por un solo motivo, pero muy importante: convirtió al ser humano en parte de una cadena de montaje dirigida a aniquilar al enemigo, fortaleciendo su pertenencia como parte de un todo, con objetivos precisos. En una cadena de aniquilación, la responsabilidad individual se diluye hasta el punto de desaparecer, la responsabilidad es del todo. Y el todo no tiene moral, es la dialéctica hegeliana.

Me pregunto qué símil podemos encontrar en este IV Reich de capitalismo desmedido y organizado, y encuentro muchos: directores de bancos como agentes de las SS dispuestos a disparar al cogote para no perder su estatus, simples cajeros judíos que acabarán en los hornos crematorios tras conducir a sus símiles a la hoguera, familias rotas por el colapso y la desesperación, saber cómo podemos comprar y consumir a cinco mil euros ganando seiscientos para no ser culpables del desastre, el afán de supervivencia buscando un Schindler que nos ponga en su lista …. Quemando historia, quemando libros, quemando ideas, para poder volver a vivir. Y ver el V, si nos dejan y si es posible ...